sábado, 30 de octubre de 2010

Si tuviera el corazón en su sitio…




 …tras romper aquella fotografía, tiró el bolígrafo con rabia y abandonó sobre el banco uno de los dos pedazos. El otro lo guardó dentro del paquete de tabaco después de darle forma cilíndrica nerviosamente. Aquella especie de papiro contenía unos versos a los que necesitaba aferrarse...
 Se despidió con la mirada de  la estación, a la vez que entraba aquella chica que lo observaba todo con curiosidad y se dirigió a la calle con paso lento y titubeante.
  Las lágrimas de sus ojos no lavaban ni la pena…
...
Si tuviera el corazón en su sitio
construiría con sus latidos
ese puente entre la bruma
que cada tarde le nubla el alma.

Si tuviera el corazón en su sitio
quisiera se lo robaran
para volver a sentirlo,
para volver a extrañar.

Si tuviera el corazón en su sitio…
...
...no habría nacido aquel maravilloso poema que tendría que estar en el libro de los Poemas de la mano tendida y sirvió de inspiración para la creación de esta entrada.

4 comentarios:

  1. Pepe no te había leído versos blancos...
    Eso no significa que no los haya hecho...
    Solo que no los lei.
    Se nos nota en la escritura mucho la entrada del otoño.
    Primero fui yo con la parca, luego tiguaz y ahora tú.
    Melancólico en su contenido, pero suaves en sus formas.
    Os envío un fuerte abrazo, y pronto casi sin darnos cuenta se instalará la primavera.
    Un besote
    Mariola

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  2. Mar.
    No sabía que se llamaran versos blancos,jeje. Yo no tengo mucha idea de estas cosas. De todos modos es una secuela de otro escrito de otra autoría y la linea estaba marcada.
    Este blog es para escritos en esta linea. Las demás cosas que escribo no las subo aquí para preservar el ambiente otoñal :-).
    Un abrazo primaveral.

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  3. Por eso siempre ando distraída en las estaciones, por todo aquello que tal vez un día pueda encontrarme.

    Lo cierto es que no tengo nada en contra de la melancolía, ni la nostalgia no me asustan esas sensaciónes. Uno necesita destilar todo lo que siente para conseguir el excelente licor de los versos. Tienen un poder sanador para quien los escribe y para quien los lee. (Y no dan resaca):))

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  4. V.
    Por ese andar distraído y esa melancolía, viste aquello.
    Estos versos son como son gracias a eso.
    La borrachera de emociones que provocó esta entrada, no deja de burbujear nunca.
    Gracias por la copa...

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